CoolSculpting es un tratamiento médico no invasivo basado en la criolipólisis, una tecnología que congela y elimina de forma definitiva las células grasas sin dañar la piel ni los tejidos circundantes.
CoolSculpting está aprobado por la FDA y es una de las técnicas más reconocidas a nivel mundial para la reducción de grasa localizada, ofreciendo resultados seguros, progresivos y naturales.